¿POR QUÉ TANTO ABANDONO?

Los de abajo 04/04/2024 Adriana B.Ricciardolo
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El delta bonaerense es un lugar apreciado por turistas nacionales y extranjeros que lo envidian, residentes permanentes y los que tienen casas de fin de semana. Es también codiciado por los desarrolladores inmobiliarios

Un mundo de gente pasa por la 1era y 2da. Sección de Tigre cada fin de semana buscando escapar de la ciudad para disfrutar el  contacto con la naturaleza, la belleza de su entorno, el acercamiento al río, un chapuzón en verano, la pesca, la flora nativa, la fauna autóctona. Entre amigos y entre mateada, parrillada y copas, los días y las noches son hermosos. Si contemplas en cielo, sentís que se nos acercó para acariciarlo. Pero ese mundo encantado que viniste a buscar se desvanece cuando al desembarcar en un muelle público y al bajar de la lancha colectiva tenés que esquivar canastos llenos de basura. La mía, la de mi vecino, la tuya y la de todos los visitantes que se van y  dejan el regalito. Bolsas y bolsa que se rasgan cuando algún animal nocturno busca que comer o cuando un perro o gato hace lo mismo. Todos esos envases vacíos, cartones de leche, comida y mucho más se derraman sobre el muelle.

La recolección de residuos en las islas es un tema muy importante para tratar con toda la población isleña y los visitantes también porque si el recolector que pasa de madrugada no ve las bolsas cerradas, la basura queda en los muelles. Aquí mi pregunta: ¿Quién debería levantar lo que otros depositan sin tomar los recaudos necesarios? ¿Cuáles son esos recaudos?

Como les decía, la empresa recolectora se lleva lo que está en bolsas, lo que no, se pudre y por inercia cae al río.  Las latas, botellas y plástico, quedan sobre los muelles hasta que un viento o lluvia los despide también al río porque nadie quiere limpiar lo que otros dejan sin responsabilidad. Hacemos actividades acuáticas, pescamos peces que después asamos, o sea que,  no sólo estamos contaminando una fuente de provisión de alimentos, sino que también nos estamos envenenando. No sólo se envenena el río con la basura, sino el petróleo y aceite quemado que salen de las lanchas que pasan aportan a ese jugo mal oliente.

Es un panorama  que podemos cambiar si nos manejamos con conciencia, con amor al prójimo y a la vida y, por nosotros mismos. ¡ Vivamos si !... vivamos bien y por el buen vivir; aprendamos a hacerlo con empatía con el ambiente que visitamos. Las islas, nuestros humedales son sistemas frágiles que tardaron cientos de años en formarse. El cuidado de este ecosistema es para protegernos porque absorben carbono y liberan oxígeno, filtran el agua y dan otros servicios ecológicos.

¿QUÉ PASARÁ SI NO LO PROTEGEMOS?

Sencillamente dejaríamos de estar viviendo en el planeta tierra…

03/04/2024

  

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